- noviembre 3, 2023
San Antero, Córdoba. El departamento de Córdoba sigue consolidándose como uno de los destinos turísticos más atrayentes en la costa norte colombiana.
Prueba de ello es el arribo a la bahía de Cispatá del municipio de San Antero del buque de bandera estadounidense National Geographic Quest, motonave que trajo consigo a 100 tripulantes y 45 turistas, quienes disfrutaron de la variedad gastronómica y la riqueza natural y cultural que posee esta zona del departamento de Córdoba.
Los visitantes disfrutaron en Tuchín de las artesanías que comunidades de la etnia Zenú fabrican en cañaflecha, mientras que en Lorica recorrieron sus baluartes arquitectónicos, entre ellos la Catedral Santa Cruz de Lorica, el Malecón del Río y el Mercado Público a orillas del río Sinú, donde también hubo muestras culturales y gastronómicas.
Cabe resaltar que el crucero de la naviera Lindblad estará hasta del 2 al 6 de noviembre, fecha en las que sus tripulantes y turistas podrán visitar sitios insignes en los municipios de San Antero, Lorica y Tuchín y la reserva Sanguare en el Golfo de Morrosquillo; para regresa entre el 16 y 20 del mismo mes.
Así mismo, vale la pena recordar que esta es segunda visita del buque National Geographic Quest a territorio cordobés, pues en octubre del 2022 este barco estuvo en la región, a la que trajo turistas estadounidenses, británicos y brasileños, lo que sin duda es un voto de confianza de este renglón de la economía y se traduce también en el posicionamiento de Córdoba como destino turístico.
De igual forma, las rutas turísticas que disfrutaron los visitantes estuvieron enmarcadas con un enfoque diferencial y sostenible, en cultura, turismo comunitario y de naturaleza, donde participan las comunidades con inclusión social y mejoramiento de su calidad de vida, como fue la visita al pueblo indígena Zenú en el corregimiento El Porvenir, donde pudieron interactuar con los maestros artesanos que se dedican a la elaboración de productos en cañaflecha.
También exploraron y disfrutaron de la rica y variada flora y fauna de la Bahía de Cispatá, una reserva natural por excelencia de la región y cuyo atractivo dejó embelesados a los turistas.
Con esta visita por parte de turistas extranjeros se desarrolla un intercambio comercial para la región que sigue jalonando la industria y que dinamiza la economía local, pues los pequeños y medianos comerciantes se benefician con la afluencia de visitantes.