La inauguración de los Juegos Olímpicos 2024 en París será histórica: por primera vez en la historia de las justas olímpicas, el evento de apertura se realizará al aire libre en la capital francesa, específicamente en el río Sena cerca de la Torre Eiffel. Los deportistas recorrerán cerca de 6 kilómetros en embarcaciones hasta el histórico edificio para los actos de apertura.

Esta estrategia forma parte de un nuevo modelo de Juegos mucho más sostenibles propuesto por París para esta edición. Un hito importante fue la limpieza del Sena por parte de las autoridades francesas, que antes no tenía aguas aptas para el baño. El 17 de julio, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, junto al presidente del comité organizador de los Juegos Olímpicos, Tony Estanguet, se bañó en el río Sena para demostrar que ahora sus aguas están “frescas” y “muy agradables”, adecuadas para los Juegos.

Además, como parte de las obras realizadas, se construyó un enorme depósito de 50 mil metros cúbicos en la estación de Austerlitz para almacenar las aguas usadas y las precipitaciones en caso de fuertes lluvias, evitando así que se viertan directamente al Sena sin tratamiento.

Gracias a estos esfuerzos, a partir del año 2025 los parisinos podrán disfrutar del río Sena en cuatro puntos especialmente habilitados para el baño, una transformación significativa que ha implicado una inversión conjunta de aproximadamente 1.400 millones de euros entre el Estado, París y la región de Isla de Francia.