La reforma pensional del presidente Gustavo Petro, que se implementará a partir del 1 de julio de 2025, traerá cambios profundos en el sistema de pensiones colombiano, con el objetivo de ampliar la cobertura y ofrecer una pensión sostenible para más ciudadanos. Sin embargo, quienes perciben ingresos mayores a 2,3 salarios mínimos legales vigentes (SMMLV), es decir, aproximadamente $2.990.000 COP en 2024, deberán adaptarse a nuevas disposiciones que afectarán su ahorro y cotización.

Entre las principales modificaciones se encuentran:

– Pilar Contributivo dividido en dos componentes: Para aquellos que ganan más de 2,3 SMMLV, los aportes se dividirán en dos partes. La primera, equivalente a 2,3 SMMLV, irá a Colpensiones, el fondo público de pensión; mientras que los ingresos por encima de este umbral se destinarán a un fondo de ahorro individual administrado por una AFP.

– Pensión consolidada única: Bajo el nuevo esquema, los fondos acumulados en Colpensiones y en el fondo privado se combinarán para ofrecer una única pensión de vejez, garantizando un ingreso unificado al momento del retiro.

– Contribuciones adicionales para ingresos elevados: Quienes ganen 4 SMMLV o más deberán realizar una contribución adicional del 1.5% de su base de cotización al Fondo de Solidaridad Pensional. Asimismo, quienes devenguen entre 7 y 20 SMMLV verán un aporte escalonado adicional que oscila entre el 1.8% y el 3%, según su nivel de ingresos.

Requisitos y plazo para cambiar de régimen de pensión:  Los interesados en cambiar entre Colpensiones y un fondo privado deberán cumplir con ciertos requisitos antes del 30 de junio de 2025:

1. Tener al menos 750 semanas cotizadas (mujeres) o 900 semanas (hombres).

2. Estar a menos de 10 años de la edad de jubilación.

3. No haber solicitado la pensión ni recibido devolución de saldos.

4. Completar una asesoría dual obligatoria para comprender las ventajas de cada régimen.

El traslado de fondo podrá realizarse hasta el 16 de julio de 2026, ofreciendo flexibilidad para cumplir con los requisitos. Este proceso y los nuevos esquemas de cotización reflejan un cambio estructural en el sistema, buscando un balance entre la sostenibilidad y la accesibilidad pensional en el país.